Málaga sigue creciendo. La provincia ha comenzado el 2011 con un hito demográfico: según los datos difundidos el lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la población ha alcanzado la cifra histórica y redonda del millón seiscientos mil habitantes. El balance -que corresponde a una estimación realizada por el citado organismo en función de los resultados del censo y de las variaciones residenciales del padrón- revela que en el último año Málaga ha ganado 19.993 vecinos o, lo que es lo mismo, 54 nuevos residentes cada día.
La provincia continua avanzando, pero aminorando el ritmo. Y es que los estragos de la crisis también han hecho mella en el mapa demográfico. Para comprobar este fenómeno basta con echar la vista atrás y bucear en las series históricas publicadas por el INE. Entre 2005 y 2006 Málaga incorporó nada menos que a 48.240 habitantes. En 2009, este marcado estirón se desaceleró y cayó hasta los 33.755 nuevos empadronados con respecto a 2008. Desde entonces, la tendencia a la baja ha ido acentuándose al calor de los cambios migratorios impulsados, principalmente, por la coyuntura económica y las alarmantes cifras de paro. De este modo, la provincia ha estrenado este siglo XXI con un incremento poblacional del 1,26% (+19.993 vecinos): casi una tercera parte del crecimiento experimentado hace un lustro.
Vista aérea de Cerrado de Calderón, Málaga
La inmigración se desacelera
A la vista de los datos oficiales, las dificultades que sortean los hogares están frenando la llegada de inmigrantes, mientras que el número de personas que deciden hacer las maletas y abandonar Málaga aumenta. Este escenario continuará en los próximos años, como reflejan las proyecciones de población del INE.
Según este informe, en 2018, la provincia tendrá 1.787.082 habitantes, un 11,6% más que los actuales. Sus conclusiones advierten de que en esa fecha se incrementarán significativamente los habitantes por encima de los 65 años (más de un 30%) mientras que la inmigración procedente de fuera de España se desplomará un 31,5%. Esta pérdida de poder de atracción es un factor clave en el citado retroceso del compás de crecimiento del censo malagueño.
Las mujeres ganan terreno
Por sexos, la balanza está prácticamente equilibrada, aunque a tenor de la estadística entre los nuevos empadronados ganan las mujeres (10.364 nuevas inscripciones den el último ejercicio), frente a los hombres, con 9.629.
El balance estimativo del INE recoge al respecto que en este comienzo de 2011 la provincia contabiliza a 657.351 féminas, mientras que el sexo opuesto queda en segundo lugar con una población fijada en torno a 630.397.
Por franjas de edad, la estadística arroja algunas conclusiones curiosas. Una de ellas es la relativa al volumen de malagueños que superan el siglo de vida y que ya asciende a las 178 personas. El incremento de la esperanza de vida es igual de significativo en el colectivo de nonagenarios, al que pertenecen ya la friolera de 7.099 habitantes del conjunto de la provincia.
Fuente: Diariosur.es
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